sábado, 28 de febrero de 2015

Imagino por encima de las posibilidades.



Imagino por encima de las posibilidades un futuro amable y accesible, 
donde crean que eres tú y no ellos,
donde no me vea cogiendo una maleta de lágrimas,
 alejándome del suelo que habito,
el cual lo empobrecen otros con su fuerte intolerancia e hipocresía,
y dando gracias, aún,
algún padre o madre de familia pueda hincar las rodillas y limpiar la porquería, 
siendo esto una alegoría de lo que esperan ya de la vida.

Imagino por encima de las posibilidades tener estabilidad en esta vida,
poder echar a volar sin que tenga que seguir atada a las cuerdas de la dependencia.
Independencia,
¿dónde?,
¿dónde se encuentran las oportunidades?,
que me arde la cabeza cuando me hablan de emprendimiento.
Pero, decirme, ¿ que emprendimiento? como vamos a emprender empezando la casa por el tejado,
cuando ni siquiera nos dan opción a tener cimientos.
Y además, entre esos tejados que pretenden que construyamos y las bases ignoradas, 
ahí se encuentran ellos, 
viviendo por encima de todas nuestras posibilidades.

Imagino por encima de las posibilidades cuando mañana me vea capaz de seguir imaginando,
a pesar de que me pegaron un movil en la mano y de tener la vista cansada,
de fijarme en un solo brillo, 
el de la triste pantalla, 
que nos educa en creer que nos acerca a los que tenemos lejos,
pero aleja a los que tenemos cerca.
Esclavos de la sociedad y sus inútiles modas,
victimas de exigencias ausentes de contenido,
que no ya en lo intelectual, sino en lo humano,
está acabando con lo que antes se llamaba personalidad.
Vacíos de ideas más allá de subir una imagen al resto del mundo que muestre lo perdidos que estamos.

Nos encontramos por encima de las posibilidades,
de sus posibilidades,
no de las nuestras, 
porque nos la robaron.

Y así estamos,
viviendo por vivir cuando nos dejan,
convertidos en rebaños que cambian la dirección según nos mande algo que ni siquiera existe,
y encima, algunos,
se atreven a llamar de forma ofensiva a los que prefirieron salirse del camino marcado y enfrentarse, endureciendo sus cimientos.

Por eso, a pesar de todo, 
aunque imagine por encima de las posibilidades,
al menos imaginamos,
imaginar....
lo contario a estar muerto,
lo contrario a vida,
vida... que dicen que mientras este,
hay esperanza.

Donde estarás...


Sheila.




miércoles, 18 de febrero de 2015

Su cabeza.



Aunque tiene posados sus pies sobre la tierra,
viven a flote sus inevitables y agresivos recuerdos
perdidos en un enorme mar,
frío y nublado,
lejos de tocar el salitre desde el suelo.

Y atacan a su cabeza cuando se avecina marea alta,
chocando contra sus pensamientos,
embriagándola con tanta rapidez y vomitando aquella espuma asquerosa,
que traen un banco de recuerdos,
o que peor,
deseos.

Deseos en un mar infinito,
que viene y que se van,
que chocan contra su realidad y con la de otros barcos
que naufragan en la intolerancia y la falta de comprensión,
sobre aquellos deseos perdidos sobre el mar.

No diría inalcanzables para ella,
porque siempre he creído en sus poderes,
simplemente son náufragos deseos
que aparecen y desaparecen en su navegar,
que hacen que ella eche el ancla a veces,
y que no llegue a encontrar nada más que eso,

... a pesar de tener una tropa a favor levantando la vela.


Se antepone ante dos hemisferios,
y aunque se quede anclada en el del mar infinito,
donde muchos optaron por tragar y hundirse,
yo siempre la esperare en aquel donde el cuerpo toma tierra,
con determinaciones,
finales...
pero también con descansos en cuerpos que pueden ser eternos.


Sheila.